ISO 14001 Gestión Medioambiental

Sistemas de Gestión Medioambiental conformes con la norma UNE-EN ISO 14001.

La ISO 14001 forma parte de una serie de normas internacionales de gestión ambiental aplicables a cualquier organización. Es una norma aceptada internacionalmente que establece cómo implantar un Sistema de gestión ambiental.

Certificarlo bajo la marca ICCL SISTEMA CERTIFICADO, según la norma ISO 14001 es un elemento diferenciador, que contribuye a mejorar la imagen de su Organización comunicando su compromiso con el medio ambiente.

Implantar un Sistema de Gestión Ambiental puede ser el primer paso para:

Poder controlar mejor el efecto de sus actividades, productos o servicios sobre el medio ambiente,
Implantar un método estructurado para fijar objetivos ambientales,
Poder recortar costes relacionados con el consumo de energía, residuos y materias primas.

Existen Organizaciones concienciadas con una elevada sensibilidad ambiental. Estas, requieren, a la hora de homologar proveedores, hacer sus negocios con empresas que comparten la misma idea. Por eso la razón de Implantar un Sistema de Gestión Ambiental y certificarlo puede ser uno de los primeros pasos para satisfacer estas demandas.

El ICCL está acreditada en ISO 14001 por la ENAC, con la referencia 21/C-MA031.

 

En el mes de septiembre de 2015 se publicó el texto de la nueva versión de la norma UNE-EN ISO 14001, en el que se recogen cambios relevantes con relación a la anterior versión publicada en 2008.

Las principales novedades pueden resumirse del siguiente modo:

Cambio en la estructura. Las primeras cláusulas de la norma se mantienen iguales con relación a la anterior versión de 2004 (Introducción, Objeto y Campo de Aplicación, Referencias Normativas, Términos y Definiciones). El resto de los contenidos de la norma se reordenan en base a los siguientes bloques de requisitos: Contexto de la Organización, Liderazgo, Planificación, Apoyo, Operación, Evaluación del desempeño y Mejora. De este modo la nueva versión de la norma se estructura en base a 10 apartados en lugar de los ocho de la versión anterior.

La nueva estructura de la norma sigue el ciclo PHVA: planificar – hacer- verificar – actuar.

Un sistema de gestión de la documentación más flexible, reduciendo márgenes para la interpretación.

Mayor responsabilidad de los liderazgos. Se espera que estos líderes alcancen mayor interacción con la alta dirección superior.

Partiendo de la comprensión del contexto en el que se desenvuelve la actividad de la organización, se busca identificar y entender las necesidades y expectativas de las diferentes partes interesadas de cara a determinar los límites y la aplicabilidad del sistema de gestión ambiental. Una definido el alcance, se deben incluir en el sistema de gestión ambiental todas las actividades, productos y servicios de la organización que estén dentro de este alcance. Estas cláusulas se pueden encontrar en los apartados 4.1 y 4.2.

Se introduce el concepto denominado “Risk-based thinking” (Enfoque basado en el riesgo). Es indispensable especificar “todos” los riesgos por adelantado y establecer estrategias para mitigar o eliminarlos. Se incrementa el nivel de detalle en la información en cuanto a procesos y controles, expectativas, identificación de partes interesadas y de los riesgos ambientales que podrían enfrentar. Hay que demostrar cómo riesgos y oportunidades ambientales, que son significativos, son manejados a lo largo de la cadena de suministro. La organización necesitará demostrar que ha establecido vínculos entre cuestiones provenientes del ambiente y cómo éstas se relacionan y son manejadas en función de la actividad o el negocio de la empresa.

Enfoque de ciclo de vida

Se deben considerar los impactos ambientales a través de la cadena de valor y la consideración de cuestiones relativas al ciclo de vida, aunque no requiere un análisis formal de ciclo de vida.

Aparece el término de “condición ambiental”, que es definida como “cambios ambientales de largo plazo que pueden afectar las actividades de la organización, los productos y servicios, exigiendo adaptación”.

El objetivo es permitir que las organizaciones puedan pensar el impacto del ambiente sobre ellas, más que el impacto que ellas ejercen sobre el ambiente.

El apartado relativo a la evaluación del cumplimiento ha sido matizado. En la ISO 14001:2004 existía la necesidad de evaluar el cumplimiento, pero en la nueva versión del 2015 es necesario especificar exactamente cómo el cumplimiento es evaluado y registrado.

žDesde ICCL hemos elaborado un documento de ayuda para facilitar la transición a las organizaciones certificadas que puede descargarse directamente desde esta misma página.

Igualmente hemos puesto a su disposición un buzón de consultas específico para esta misión desde el que atenderemos las dudas que sobre la aplicación de la nueva versión de la norma puedan surgir.

DOS TEMAS IMPORTANTES que deben conocer las entidades certificadas son:

a) El periodo de vigencia de los certificados otorgados finalizará el 15/09/2018 para UNE-EN ISO 14001:2004 , fecha que se corresponde con la finalización del periodo de transición establecido para adaptar los sistemas de gestión a la nueva versión aprobada de la norma UNE-EN ISO 14001:2015. A partir de la fecha indicada los certificados emitidos contra la versión anterior dejarán de ser válidos.

b) Siguiendo las instrucciones recibidas desde la Entidad Nacional de Acreditación ENAC, debemos informar de que cuando se proceda a la evaluación de la transición coincidiendo con un seguimiento o renovación planificadas (también aplicable a transferencias), se asignará y presupuestará tiempo adicional que permita una certificación fiable y técnicamente "robusta", considerando que estas auditorías tendrán un doble objetivo:

- realizar la evaluación planificada del ciclo, empleando el tiempo que ya se determinó o se determine necesario para posibilitar una investigación y muestreo adecuados, y

- evaluar la conformidad con los requisitos nuevos y/o adicionales de las versiones de 2015, para lo cual es necesario determinar un tiempo de auditoría adicional al anterior.

Este tiempo adicional se establecerá caso por caso a través del Plan de Auditoría en función de las características de cada una de las organizaciones siguiendo las directrices establecidas en la cláusula 9.1.4 de ISO 17021-1:2015